«Aferrados en todos los espacios,
en todos los estados;
surgiendo desde las entrañas mismas,
crecen, salen, se entrelazan y multiplican.
Uniéndose en una misma especie,
en una misma realidad.
La misma fragilidad, un mismo dolor.
Todos por igual tratan de sobrevivir
y de encontrar su propio sector.
Balanceándose, donde la verdad es irreal,
entre lo real y desigual.
Brincando de sueño en sueño.
Cuando todo empieza, comienza un final.
Repletos de ardientes emociones,
viven de los mismos colores;
estallan a gritos y escupen su existencia.
cargan en sus ojos extintos soles,
simples niños sin inocencia.»
